lunes, 29 de enero de 2024

ESTEBANILLO GONZÁLEZ. Crónica Teatral

 

ESTEBANILLO GONZÁLEZ. Crónica Teatral

La compañía extremeña Teatro Guirigai, que este año cumple los 45 de existencia, ha puesto en escena durante el pasado fin de semana en el Teatro de la Estación la obra de autor anónimo titulada ‘Estebanillo González, soldado y bufón’, un clásico anónimo del género narrativo, del siglo XVII.

La obra es una parodia cómica, de merecida fama por su ácido retrato de una época de la historia española, presentada en el último Festival de Teatro clásico de Cáceres. La acción transcurre en la ciudad de Nápoles a mediados del siglo mencionado, cuando esa perla mediterránea estaba ocupada por el Imperio español y era una plaza estratégica frente a las amenazas de los turcos, los berberiscos y los franceses. 

El tabernero Estebanillo tiene entre sus clientes a un poeta, Gabriel de la Vega, y a un soldado, el capitán Gerónimo de Bran. Con ellos organiza juergas, trapicheos, apuestas y ficciones. La más recurrente  se refiere a la Guerra de los Treinta Años, en la que los ejércitos españoles intervinieron por aquella época.

Los tres amiguetes, a quienes interpretan Jesús Peñas, Raúl Rodríguez y Rubén Arcas, escenifican sus presuntas aventuras durante el conflicto, en el que dicen haber participado, aunque se trata de un simple recurso para ejercitar su espíritu lúdico porque en ello radica la esencia de la comedia picaresca, un género de especial relevancia en nuestra trayectoria literaria.

El montaje de la obra es abigarrado, con presuntos escenarios bélicos que se mezclan con una abarrotada sucesión de episodios y una singular colección de objetos que los actores utilizan a un ritmo frenético, incluyendo canciones de época, como algunas tarantelas y villanescas napolitanas en las que solicitan la participación del público.

La versión y dirección de Agustín Iglesias da como resultado una obra festiva que, aun manteniéndose dentro del marco histórico que retrata, permite al espectador hacer traslaciones al tiempo presente, porque en esencia la idiosincrasia española no ha variado tanto en los últimos siglos.

Francisco Javier Aguirre

 

No hay comentarios:

Publicar un comentario